
Cuando miramos una carta de tarot, no solo importan las figuras, los símbolos o la posición en la tirada. Los colores también juegan un papel fundamental y aportan una capa más profunda de significado. Cada tono tiene una vibración específica que nos conecta con distintas emociones, estados espirituales y energías. En este artículo te contamos qué representa cada color y cómo interpretarlo en tus lecturas.
Amarillo:
El color amarillo suele aparecer en cartas que reflejan optimismo, energía vital, intelecto y crecimiento personal. Es un color asociado al sol y al elemento fuego. En lecturas, puede indicar momentos de claridad mental, iluminación espiritual y alegría compartida. Ejemplos: El Sol, El Loco, El Mago.
Palabras clave: alegría, vitalidad, claridad, optimismo, creatividad, inteligencia, energía positiva, entusiasmo.
Rojo:
El rojo simboliza fuerza, coraje, pasión y acción. Es el color del chakra raíz, por lo que también está ligado a lo material y la supervivencia. Si predomina en una carta, puede señalar deseos intensos, valentía, o advertencias sobre impulsividad y conflictos. Ejemplos: El Emperador, La Justicia, El Sumo Sacerdote.
Palabras clave: pasión, impulso, voluntad, motivación, acción, poder.
Azul:
El azul es el color del agua y del cielo, y suele relacionarse con la espiritualidad, la intuición y la comunicación. Es un color calmante, que promueve la reflexión y la sabiduría. Su presencia indica que hay que escuchar a la voz interior o confiar en el flujo natural de las cosas. Ejemplos: La Sacerdotisa, La Luna, El Ermitaño.
Palabras clave: intuición, paz, sabiduría, calma, introspección, sensibilidad, espiritualidad.
Verde:
El verde representa la naturaleza, la fertilidad, el corazón y la sanación. Está conectado con el chakra del corazón y con el proceso de crecimiento personal. Cuando aparece en una lectura, puede hablar de armonía, necesidad de equilibrio emocional o situaciones que requieren apertura y perdón. También se relaciona con la salud y el dinero. Ejemplos: La Estrella, Cuatro de Copas, Siete de Oros.
Palabras clave: crecimiento, sanación, equilibrio, naturaleza, esperanza, corazón, abundancia.
Gris y Colores Apagados
Cuando una carta tiene tonalidades grises o desaturadas, puede estar mostrando aburrimiento, falta de acción, frialdad emocional o incluso escasez. No es necesariamente negativo, pero invita a revisar lo que está «quieto» en la vida del consultante. Ejemplos: El Colgado, Cinco de Copas, Ocho de Espadas.
Palabras clave: neutralidad, pausa, estancamiento, conservadurismo, rutina.
Negro:
El negro es un color profundo que representa lo oculto, lo inconsciente y los finales que dan lugar a nuevos comienzos. Aunque puede asociarse con negatividad, también es el color de la transmutación espiritual. Puede indicar una etapa que llega a su fin o una verdad que debe salir a la luz. Ejemplos: La Muerte, El Diablo, Cinco de Oros.
Palabras clave: misterio, finales, transformación, cierre, introspección, sombra.
Los colores en el tarot
Los colores en el tarot no están puestos al azar. Cada uno aporta una capa de información que enriquece la lectura y conecta con distintos planos de la experiencia humana. La próxima vez que tires las cartas, presta atención a los colores que dominan tu tirada.
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